El joven, quien se declaró como supremacista blanco, trasmitió en vivo por red social Twitch el ataque al supermercado.
Al menos diez personas murieron y tres resultados heridas, dos de ellas de gravedad, en un tiroteo perpetrado y transmitido en vivo por redes sociales por Payton Gendron, un adolescente de 18 años, en un supermercado de la ciudad de Buffalo, en el estado de Nueva York, Estados Unidos, quien se declaró como «un supremacista blanco y antisemita».
El FBI informó, por su parte, que investiga como «crimen de odio» el tiroteo y como «un caso de violencia de extremismo racista», sostuvo Stephen Belongia, agente especial de la oficina del FBI en Buffalo, según la agencia de noticias AFP.
«Varias personas fueron alcanzadas por disparos. El tirador está bajo custodia. Se insta a los automovilistas y residentes a evitar el área», alertó vía Twitter la policía de esa ciudad estadounidense.
Gendron entró al supermercado Tops Friendly Market en Buffalo, ciudad ubicada al norte del estado de Nueva York, con un chaleco antibalas y un rifle AR-15 y abrió fuego a mansalva, lo que desató otra tragedia de sangre y violencia en el marco de asesinatos masivos en Estados Unidos.
No solo eso. Además hizo una transmisión en vivo del asalto en Twitch, una popular red social de consumo de videos.
El número de víctimas de la matanza en el supermercado podría haber sido aún peor, si se considera que ocurrió un sábado por la tarde, cuando ese comercio suele estar lleno de clientes.
«Lo vi entrar y comenzar a disparar», señaló un testigo; en tanto otro indicó que, tras perpetrar sus crímenes, «salió del supermercado, guardó su arma, se arrodilló y se entregó a la policía».
Shonnell Harris, una de las encargadas del local, manifestó que vio al atacante. «Era un hombre joven, blanco, que actuaba como si estuviera en el Ejército», detalló.
La mujer aseguró además que escuchó «como unos setenta disparos» hasta que a las corridas logró salir del lugar, mientras un policía contó que encontró «cinco cuerpos en el estacionamiento».
«El joven está bajo la custodia de los agentes. Estamos monitoreando la situación», afirmó la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul.
La zona lindera al supermercado estuvo custodiada por SWAT, la división de asalto de la policía, y también por algunos agentes del FBI, quienes interrogaron a los testigos y revisaron todos los vídeos disponibles grabados por las personas presentes en el lugar.
De acuerdo a los primeros avances de la investigación, las fuerzas de seguridad estadounidenses detectaron que en un vídeo online, se autodefine como «un supremacista y antisemita», y confiesa su «preocupación» porque los blancos ahora están siendo reemplazados por minorías.
Es por ello que los investigadores estimaron que la elección del supermercado, ubicado en la Avenida Jefferson 1275 de Buffalo, no fue casual: se encuentra en un vecindario habitado en su mayoría por población afroamericana.
En el vídeo supuestamente difundido por el asesino en Twitch, «se ven escenas espantosas, incluida una mujer a la que le disparan en la cabeza cuando sale del supermercado», consignó la agencia de noticias ANSA.
Medios estadounidenses indicaron que Gendron, quien fue acusado de asesinato en primer grado, un delito que prevé cadena perpetua, puso en línea un manifiesto de conspiración supremacista de 106 páginas.
Entre otros planteos, fugura uno que reza: «Quiero que entiendas solo una cosa de este documento. Las tasas de natalidad de los blancos deben cambiar. La población blanca disminuye. Para mantener su población es necesario alcanzar una tasa de fecundidad que en occidente debe ser de unos 2,06 hijos por mujer».
Una señal de alerta que no fue advertida
Funcionarios de seguridad citados por portales noticiosos revelaron que agentes de la policía del estado de Nueva York fueron llamados a la escuela secundaria de Gendron en junio pasado, por un informe según el cual el adolescente, por entonces de 17 años, había hecho declaraciones amenazantes.
Gendron amenazó con llevar a cabo un tiroteo en la escuela secundaria Susquehanna Valley, en Conklin, Nueva York, en el momento de la graduación, confesó un oficial de la ley que habló bajo condición de anonimato, ya que no estaba autorizado a hablar públicamente sobre la investigación.
El joven nunca fue acusado de ningún delito, de acuerdo al comisionado de policía de Buffalo, Joseph Gramaglia.
Tampoco tuvo más contacto con las fuerzas del orden después de recibir el alta tras una evaluación de salud mental que lo llevó a un hospital durante un día y medio.
«Nadie llamó. Nadie presentó ninguna queja. La amenaza era de naturaleza general, no racial», detalló Gramaglia.
Nueva York es uno de los varios estados que promulgó leyes de «bandera roja» en los últimos años con la intención de tratar de prevenir tiroteos masivos cometidos por personas que muestran señales de advertencia de que podrían ser una amenaza para ellos mismos o para otros.
Biden y Guterres condenaron racismo luego del ataque
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, condenaron el ataque en Buffalo, que dejó al menos 10 muertos, la mayoría de ellos afroamericanos.
El mandatario instó a la población «a trabajar juntos para abordar el odio que sigue siendo una mancha en el alma de Estados Unidos».
«Un hombre solo con armas de guerra y un alma llena de odio mató a 10 personas inocentes a sangre fría en un supermercado», agregó Biden durante un evento realizado en el Capitolio para homenajear a los policías fallecidos en 2021, reseñó la agencia de noticias ANSA.
«El secretario general (Guterres) se mostró consternado por el asesinato de 10 personas por un acto de extremismo violento racista en Buffalo», informó, por su parte, el portavoz adjunto de la entidad, Farhan Haq.
Según el vocero, el portugués Guterres «condena en los términos más enérgicos el racismo en todas sus formas, así como la discriminación por motivos raciales, religiosos o étnicos y espera que se hará justicia», recogió la agencia de noticias Sputnik.
En marzo de 2021, hace poco más de un año, se produjo la última masacre en un supermercado, el de Boulder, Colorado, donde perdieron la vida diez personas.
